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lunes, 20 de febrero de 2017

Nacimiento de un planazo

Todo empieza una tarde de sábado, yo estaba tumbado en mi cama mirando el facebook en mi móvil, cuando en una de las publicaciones que sube la gente veo una imagen que anuncia la llegada del 6 naciones. Que para quien no lo sepa es un torneo de rugby jugado en Europa donde se enfrentan los 6 mejores equipos europeos ( Inglaterra, Wales, Irlanda, Escocia, Francia, Italia). En ese momento por mi cabeza pasa una idea ilusa de ir a ver uno de esos
partidos en directo, ya que siempre los he visto por la televisión y es un delito no ir a ver uno cuando se juega practicante al lado. Me levanto de la cama y me sienta al ordenador con la esperanza de encontrar entradas para cualquier partido que se jugase recientemente y a los 5 minutos de búsqueda encuentro entradas disponibles para el Inglaterra vs Francia, un partido bastante jugoso se puede decir, pero el precio se desorbitaba bastante y hace que mi interés, en aquella idea decaiga drasticamente, pero mirando un poco mas abajo descubro, otro partido el Italia vs Wales que se disputaba el domingo siguiente en Roma, no era un partido tan jugoso somo el anterior pero podría estar bien y además el precio era más o menos asequible. Toda la ilusión del principio vuelve a mi y acto seguido me pongo a relizar lo que sería operación de reclutamiento, necesitaba a un loco como yo como mínimo para hacer real esta aventura. Pregunto a mis amigos del rugby que serían los principales interesados en ir a verlo, pero su respuesta fue negativa a mi propuesta, no estaban dispuestos a realizar semejante hazaña. Pero yo no desistí todavía me quedaba gente por preguntar antes de rendirme. Me meto en el grupo de whatsapp de mis amigos de siempre y les comento mi idea, pero de vuelta recibo respuestas negativas, así que decidí cambiar de táctica,la cosa no funcionaría si trataba de convencerlos por teléfono, necesitaba hablarlo cara a cara insitu y aplicar todas mis dotes de tunante, asique paso del tema y les hablo de quedar esa noche y salir por Madrid, eso naturalmente si recibió una respuesta favorable. Pero la cosa se trunca, me acuerdo que yo ya había hecho planes para salir por Móstoles con dos compañeras de clase, pero claro salir solamente tres personas no tiene mucha gracia, me pongo a peguntar a mis dos amigas por el grupo de clase si no prefieren salir por Madrid que allí hay más lugares para salir y posiblemente nos lo pasemos mucho mejor y así mis amigos también podrían venirse y hablarles otra vez del planazo del finde que se estaba gestando en mi cabeza. Pero a mi pregunta la responde mi compañera cordobesa, que saldría por Madrid con una chica y un chico de clase a tomar algo por Malasaña. Ese plan me parecía guay pero las amigas con las que había quedado no dan su brazo a torcer en apuntarse al nuevo plan porque una de ellas salía tarde de trabajar y no podía venirse a Madrid, por lo que yo tras mucho pensarlo decido apuntarme al plan de malasaña quedando como un fatal amigo hay que reconocerlo. Tras este punto aparte, me organizo la noche con mis amigos y las dos chicas y el chico de mi clase y planeo la jugada para soltar la caña del finde idílico que me había montado en mi cabeza esa misma tarde.

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